lunes, 23 de abril de 2012

Más allá del Olimpo Parte 6




Rai: "Bien... ya es hora...". Y así empezó ese día, los dioses del Olimpo sabían que Raibeart llegaría para reclamar la última piedra. Zeus por su parte no podía permitir eso y desplegó a todos su ejercito por el Olimpo. Era momento de esperar por el hijo de Caos... Solo un poco más... Desde lejos se diviso una ola de agua que inundó parte del Olimpo, mientras que otra gran ola de lava se enfriaba con el agua y formaba un puente entre la tierra y la tierra de los Dioses... Los gritos llegaban...


Los espectros corrían por la lava seguidos de los tritones y empezó la batalla. Sangre por todos lados, ejércitos destruidos en medio de una lucha de sangre, de poder, de valentía, de Dioses y semi-Dioses. Zeus esperaba en su trono, la llegada de él. "¿Dónde podría estar?¿Acaso esto es parte de su plan?" No era fácil pensar en un contra ataque para Zeus, hasta que detrás de su trono escucho una voz que decía: "Es curioso que no tengas un guardaespaldas"...

Zeus salto inmediatamente dejando que un tridente cortara su trono... Rai había aparecido, esta vez tenía el tridente de Poseidón y en su espalda el Arco de Hades. Zeus desenvainó su espada, la espada que una vez acabó una guerra con Hades, y esta vez lo volvería a hacer. "¿Acaso no sabes con quien te enfrentas mortal?" Rai solamente pudo reír y dijo: "Porque lo sé, es que me estoy enfrentando contra ti". Golpe tras golpe fueron intercambiados.

Cada golpe de Zeus era un rayo suelto de su espada, cada golpe de Rai era una ola gigantesca del mar. Dos fuerzas impresionantes librando una batalla que podría durar miles de años, pero esto debía acabar... "Quédate donde estas mortal o ella perecerá" Aina había aparecido detrás de los escombros del trono de Zeus. Rai uso el tridente y creó una ola para protegerla, corriendo hacia ella le dijo: "Toma este arco y vete de aquí, llamaré a Cerbero, sube en él, te protegerá de cualquier cosa". Y con un silvido el perro de tres cabezas apareció y se la llevó tal como Rai había dicho.

"¿Qué es lo que tanto temes mortal?¿Acaso intentas protegerla? Sabes cual es tu destino y en cualquiera de los casos perecerás al final" Una vez dicho esto Zeus se dirigió hasta Raibeart para cortar su cabeza con un rayo y se escuchó el grito:"¡¡¡¡¡MUEREEEEEE!!!!!". Rai no podría morir aquí tenia que pelear y lo haría por ella y grito tambien: "¡¡¡¡¡POR AINA!!!!!!!".  Ambos se detuvieron después de los golpes. Ninguno movió un solo músculo durante dos minutos. Se podían escuchar los truenos y los mares, uno de los dos habría sido acabado...

Zeus dijo: "Sabía que acabaría así". Para cuando Rai se dio cuenta, un corte desde su oreja hasta por debajo de su boca broto sangre, Rai quedo de rodillas... Sin aliento, pero haciendo un esfuerzo sobre humano le contestó: "Pero muchos tenemos Ases bajo la manga" Del pecho de Zeus brotaron tres cortes ¡El tridente lo había herido! Del cielo volaron cuatro alas blancas, Aina estaba en el cielo y asestó cuatro flechas de luz para Zeus.

"Que se evidencie que este día, yo Raibeart, conseguí derrotar a Zeus, Dios del Trueno y del Olimpo, y como victorioso ¡RECLAMO SU PIEDRA DEL TRUENO!" Rai logró sacar la piedra de la cabeza de Zeus, y le dio todo el conocimiento hasta que cayó de rodillas. Un fuerte dolor de cabeza lo atacó,como si fuese un trueno el que le acabase de golpear. Todo le daba vueltas, lo único que pudo ver era como su ángel Aina bajaba del cielo y lo agarraba entre sus brazos. Estaba perdiendo el conocimiento, y de sus labios solo se olló un: "No me dejes... Aina... Te... Amo...".

viernes, 13 de abril de 2012

Lo que gritó el silencio

¿Sabes acaso todo lo que escondo tras mi sonrisa al verte? ¿Sabes acaso todo lo que yo pudiera hacer por ti si tan solo supieras lo que pienso? Tantas cosas me confunden, tanta vida me aturde, tantos sueños me cansan, tantos golpes me atrasan. Pero ante toda esta adversidad, mantengo mi fe en que algún día sepas lo que he callado, que sigas siendo ese amor ilusionado, que me mantiene vivo, que me hace hacer todo lo que pueda por mejorar con mi granito de arena.

¿Que siento al verte? Siento miles de cosas pasar por mi cabeza, no pienso coherentemente, solo actúo e incluso he llegado a actuar un poco tonto o simplemente me sonrojo con facilidad al verte. Te encuentro en el momento menos esperado, te siento mas cercana cuando me siento triste o solo. No lloro en esos momentos porque podría parecer un poco raro, ganas de salir corriendo y de decir todo lo que siento en estos momentos me dan.

De llamarte y de decirte: "¡TE AMO!" Escribir es fácil para este servidor, sentir las cosas es un don que Dios me dio, convertir los sentimientos, los pensamientos, las ilusiones y los momentos en historias, en notas, en situaciones que pueden llegar a ser hermosas desde algunos puntos de vista. La gente me pregunta cuando hablo de ti: "¿Te gusta de verdad?¿Acaso puedes decir que la amas?" Con toda seguridad puedo decir: "Si la amo, porque yo se lo que siento".

Se que no soy perfecto, tengo miles de millones de defectos, que estoy a cien años luz de ser lo que alguien pudiese esperar.  Sin embargo puedo ofrecer algunas cosas que talvez no valen mucho, e incluso son impalpables. Amor, afecto, cariño, soporte, comprensión, solidaridad, tolerancia, humildad, pero sobre todo un poco de mi atención... Bueno no un poco ya que ocupas un gran espacio en mi corazón y en mi mente. 

Quisiera poder decirle a alguien todo esto, desgraciadamente nadie puede escuchar, muchas personas están ocupadas, otras simplemente piensan que es una perdida de tiempo, otras se afanan en su mundo que no pueden ver a su alrededor, otras solo son... Bueno cada quien tiene su tema que defender, y no quiero indagar mas para no "entrometerme" en su vida. Por desgracias nadie puede entenderme y por eso lloro.

Lloro porque todo esto es maravilloso, porque es algo que la vida te da, te hace sentir, te hace vivir, te hace demostrarte que existen cosas hermosas aún en esta tierra. Talvez solo sea un loco mas de esta vida, talvez solo sea un idiota mas que cree en la ilusión, talvez sea un soñador o algo mas... ¿Quien sabe?... Duele porque veo... Te veo a ti y un abismo nos separa, que espero que cuando salte, algo suceda... O talvez no...

lunes, 9 de abril de 2012

Más allá el Olimpo Parte 5



Fue en esa victoria donde logró obtener sus alas, Aina logró extender sus alas y no fueron dos, fueron cuatro alas, dos en cada costado y no solo eso, sus ojos se tornaron blancos como el color de las nubes del cielo. Llego volando hasta los brazos de Raibeart y en un vuelo espléndido entre sus alas de fuego y sus alas blancas se formó un vuelo de amor y de pasión en torno a un baile muy hermoso. Al final, cuando Rai intento abrazar con sus alas de llama a Aina sus alas encendieron un fuego azul en las de ella, un espectáculo sin igual.

De la nada un camino hacia las profundas aguas del océano apareció Poseidón y desde ahí le dijo: "Acompáñeme Señor, déjeme mostrarle mis tierras". Seguido de Aina, Rai bajo hasta la superficie, con el poder de la piedra de agua, hizo que Aina lograra respirar bajo el agua, ya que él al poseerla no le afectaba en lo absoluto. El cambio fue impresionante, sus alas se extinguieron, pero se tornaron azules, como las de un dragón de agua.

En segundos se encontraban en la ciudad perdida, Atlantis, una ciudad bajo el agua, con tritones que vivían en ella. Ellos eran como los humanos pero a diferencia, ellos podían respirar gracias al poder de Poseidón. Cuando Rai se dirigió al trono de Él, le dijo: "Este es tu reino, no me entregues un tridente que no merezco. Seré justo y franco, tu has reinado y mereces ser el Dios de los mares. Hay que descansar y recuperar fuerzas para la próxima batalla".

En un cuarto adornado por estrellas de mar y muy colorido por corales en todas partes, Rai y Aina lograron descansar. El la abrazó, le beso la frente y le dijo: "Con tus alas blancas, con tu mirada pura, con tus vestiduras, pareces un ángel caído del Olimpo". Ella gentilmente lo miró y con profunda pasión lo beso. Un beso lleno de amor, de cariño, de dulzura y de emoción. Ella le dijo: "Me has mostrado un mundo hermoso, desde el mismo infierno hasta un mundo perdido. Eres espectacular Rai".

El amanecer llego y el cielo se despejó totalmente, luces se veían y antorchas prendidas se dibujaban como siluetas en el cielo, desnudo ante la vista. Una ciudadela de oro deslumbraba la mañana, y en lo mas alto se encontraba el trono de Zeus, el Dios del trueno. A su lado los ejércitos de los Dioses del Olimpo, preparados para la batalla. Esperando una señal que vendría desde las profundidades del mar. Él sabia que Raibeart se encontraba ahí descansando y que en cualquier momento atacaría, solo quedaba esperar...

lunes, 2 de abril de 2012

Más allá el Olimpo Parte 4


Una batalla crecía en medio del mar, un tornado de agua se estaba formando y se divisaba una fuerte lluvia. Poseidón en cima de una ola gigantesca aguardaba buscando a su oponente, el hombre llamado Raibeart que había logrado obtener la piedra de fuego y dominar ahora los infiernos. Cuando de pronto un volcán dormido en medio del océano empezó a surgir de entre el mar y con su lava formando una gran isla evaporando mucha agua.

Poseidón atacó con todas sus fuerzas el volcán pero no lo derribo y desde su cráter los guerreros del inframundo empezaron a salir, y del mar se podían divisar muchos guerreros tritones y la pelea comenzó. Las espadas y tridentes sonaban en el combate, una lucha de poder se empezó a crear. Hades por su parte en el centro del volcán y Poseidón en el otro extremo en una ola de agua. 

Hades salió disparado del volcán con un haz de fuego en su espalda y Poseidón de su ola, con un haz de agua también en su espalda. El impacto fue inminente, un terremoto sacudió la tierra, la lucha por poder estaba ahí, mar contra tierra. Las nubes se volvieron negras, las lanzas hechas de agua eran devastadoras, sin embargo Hades poseía el único arco que podía vencerlo, nada en la misma tierra podría ganarle en ese momento. Una lluvia de flechas de luz y lanzas de agua fue la que sobrevoló el cielo.

De lo lejos se pudo divisar un destello rojo, la piedra de fuego entró en el campo, Rai irrumpió la lluvia de flechas y lanzas y destruyó con su poder de fuego todas las lanzas y las evaporó. En su espalda dos alas de fuego con la intensidad de diez soles y una mano envuelta en llamas. Dijo: "Espero que te prepares Poseidón porque te derrotaré con mis propias manos" y Poseidón dijo: "Eso lo veremos". Las bolas de fuego se unieron a la lluvia y Hades y Rai dominaron la pelea desde ese momento. 

Cuando Poseidón se descuidó, Hades logró asestar varias flechas en el pecho de él, Rai la vio, la piedra de agua yacía en su pecho, la estrategia cambió, Rai ataco con varias bolas de fuego, creando una atmósfera de niebla cuando golpeo con fuerza a Poseidón que lo dejo encima del cráter del volcán. Con una sonrisa en los labios Rai dijo: "Estas donde yo lo planee" Hades lanzó cuatro flechas que sujetaron a Poseidón de los brazos y piernas en la orilla del cráter. 

Raibeart metió su mano izquierda en el pecho de Poseidón, el mar se estremeció, pero la piedra era suya. Luego de esto dijo: "Ahora pueden cesar de luchar guerreros del agua y del inframundo, recobren sus fuerzas y descansen. La batalla mas importante está cerca, miren las nubes, negras de odio, llenas de relámpagos y truenos. ¡¡¡ESCÚCHAME ZEUS, VOY POR TI!!!" Y desde lo lejos el cielo se partió en dos, un relámpago abrió el cielo, símbolo de que Zeus escuchó lo que dijo Raibeart.