¿Cambias tu, cambio yo?

Tanto espacio, tanto tiempo, tanto sueño, tanto viento. Observo las cosas como pasan pero mi realidad no cambia... Sigo aquí, esperando, cansándome la vida por no tener nada mejor que hacer. No es una forma de vida muy placentera pero es una forma de vida quiérase o no. Concuerdo con muchas historias que me cuentan, sobre futuros no muy buenos, llenos de obscuridad y acaparados de problemas. Es como si estuviésemos destinados a vivir con ello.

¡Hallase visto tal barbarie! Un loco que piensa que el mundo esta mal, que simplemente las cosas no van bien por que solo él lo cree. Y toda la gente lo señala como si fuese un tonto o un lunático que piensa que las cosas están mal. Claro que la gente tiene miedo y por ello lo señalan, sin embargo por alguna extraña razón ese loco no vive con miedo, pareciere que el sentimiento es llevadero y con cada cosa que dice el miedo se disipase y simplemente fuese el producto de sus palabras.

No obstante, el miedo no es algo que le preocupe, mas bien le preocupa la soledad con la que vive. El estilo de vida que lleva lo ha empujado a vivir triste, a vivir con con el silencio, a compartir su aire con la dueña de todo ese espacio, la soledad. Es en ese momento en el que te preguntas si estarías dispuesto a compartir todo eso con otra persona, aunque en realidad sea que la otra persona este dispuesta a compartir tus problemas, a aceptar tus errores y a reinventar tu historia.

Cuando empiezo a pensar comienzo con una sola pregunta, después de un largo monólogo, me encuentro con mas de dieciséis preguntas las cuales no llegan a tener ninguna respuesta, incluso cuando esas preguntas resuenan en la ventana de otra persona. Talvez no sean tus problemas los que molestan al mundo, sino tu apatía hacia los problemas de los demás. Se un poco mas sensible ante los problemas de los demás y ayuda a las personas para que así también te ayuden. Cambia primero para que los demás lo hagan.