viernes, 4 de marzo de 2011

Con sabor a Cuba

Foto por Rodrigo Ofarrill
Me retiraré un tiempo del tema que estaba escribiendo y hablaré de otra cosa. He notado que en muchas de mis canciones, se habla de un lugar muy especial. Un lugar pequeño y alejado del ambiente de oficina, del ajetreo constante que la economía ofrece a todo el mundo, me refiero a Cuba. Con sus calles doradas, con ese sabor a libertad, con ese olor a hierbabuena y un tanto a alcohol, cigarros, libertinaje y muchas cosas más. Definitivamente un sueño para todos los jóvenes.

Y es que la verdad tomo de referencia a cuba, porque tengo un amigo cubano que visita en estos momentos sus querida tierra natal. Me inunda de emoción y sentimiento al ver tan hermosas vistas por parte de la querida Cuba. Es como si mandara un llamado a ser visitada, a ser vista, a ser recorrida, a ser descubierta por todos aquellos amantes de la libertad. Yo por mi parte iría con una mochila, unas mudadas de ropa adentro, mi pasaporte y algunos dólares.

Foto por Rodrigo Ofarrill
El sentido de aventura llena mi sangre y la adrenalina invade mi cabeza y corazón. Poder ver el mar en su máximo esplendor, el poder apreciar la belleza en las pequeñas cosas, el poder hacer lo que uno quiera en donde sea, me parece maravilloso y perfecto. Una bahía tan simple podría convertirse en fuente de inspiración para muchos escritores y la simplicidad de una ciudad puede convertirse en un glorioso sentimiento y consuelo para la juventud.

Para este humilde escritor seguirá siendo un sueño el poder viajar algún día como "mochilero" (como se les dice generalmente a los Estadounidenses en tierras extranjeras). Espero y confío que mas adelante en mi vida tenga la oportunidad de hacerlo. Tantas historias que guarda la Habana, como la canción Puente, o como la joven Cubana que se enamoro del Estadounidense, pero esas son canciones que deban escuchar por si mismos, hasta la próxima nota.

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